Redacción / Inversión Turística
La cadena hotelera Art Hoteles establecida en Ecuador ofrece al turismo nacional e internacional del país andino alojamiento tipo boutique de lujo, en Quito, Otavalo y Cuenca; el primero llamado Hotel Mama Cuchara en la capital, el segundo es el Hotel Otavalo en la ciudad del mismo nombre y el tercero es Cruz del Vado en Cuenca.
La empresa que opera en total 81 habitaciones integra experiencias culturales, ya que sus propiedades están en lugares icónicos de las ciudades más importantes de Ecuador; además de ofrecer calidad en el servicio dentro del sector de lujo, con productos de la hospitalidad ecuatoriana.
De acuerdo con la compañía, todos los hoteles presentan una mezcla de diseño tradicional y moderno, fusionando así la emoción de una nueva cultura con todas las comodidades del hogar; ya que se trabaja con la casa de diseño local UIO Design District.
Asimismo, los atributos de las propiedades de Art Hotels se caracterizan por “integrar las experiencias culturales, la arquitectura emblemática, narración de cuentos a través de obras de arte, compromiso con las comunidades locales y, por supuesto, servicio personalizado de cinco estrellas. Individualmente, cada propiedad posee un máximo de treinta habitaciones”.
En el caso de Hotel Mama Cuchara, en Quito, el cual se alberga en una antigua casa colonial española que fue resucitada y modernizada después de una meticulosa renovación, es una opción para el turismo la ventaja de la comodidad sin aislarse del corazón de la ciudad.
Ubicado en la calle Rocafuerte del Centro Histórico de Quito, Hotel Mama Cuchara, cuenta con un patio central cubierto por un domo que facilita la vista del cielo quiteño y permite la entrada de luz hacia todos los ambientes. “Desde este sitio se nota una interesante fusión de elementos de diferentes épocas. La estructura tradicional resalta en el espacio, junto con una iluminación cálida, obras de arte y mobiliario moderno. Las obras de arte son un particular que destaca no solo en los espacios comunales, sino en cada rincón del hotel, incluidas las habitaciones”, comentó uno de los huéspedes a Inversión Turística.
Según información de la cadena hotelera, las obras de arte, esta es una característica de ArtHotels, “la idea es fusionar lo antiguo, lo contemporáneo y lo moderno. Lo antiguo da belleza por sus detalles, lo contemporáneo da comodidad y los materiales modernos dan flexibilidad. Los resultados son una casa-hotel-boutique, cómoda y con la tecnología necesaria en la actualidad”. Desde el ‘rooftop’ hay una vista de 360 grados de Quito.
Hotel Mama Cuchara cuenta con 27 habitaciones divididas en cuatro categorías, el piso de su lobby, restaurante y espacios comunes son de mármol al igual que las paredes y pisos de los baños, mientras que en las habitaciones se colocó piso de ingeniería, que es de madera, instalado como flotante, “para lograr la calidez necesaria”, al igual que se utilizó vidrio para lograr transparencia.
Además de estos materiales cálidos el inmueble cuenta con elementos que dan vida al espacio como plantas y geranios, que son las flores tradicionales quiteñas. En el interior del hotel también destacan los vitrales de puertas y ventanas, los pasamanos de hierro forjado y la pileta del patio, denominada Vuelo de los cóndores, donde destaca la figura de esta ave, en una obra del artista ecuatoriano Mauricio Sánchez.
Las habitaciones de lujo cuentan con espacios de relajación también con un diseño moderno combinado con detalles como espaldares de cama tallados y obras del arte quiteño. Junto con cada uno de estos componentes se encuentra la iluminación.
Cabe destacar que la entrada de luz natural, es importante para el edificio ya que la iluminación inicia desde la que ingresa por el domo del patio central y las puertas y ventanas en todo el hotel hasta los nichos de luz en algunos baños; mientras que en el interior, esto se complementa con luces LED de tono cálido para ambientar.
Es de mencionar y como lo ha afirmado la cadena hotelera, todo lo que contiene el hotel en cuestión de mobiliario y acabados fue hecho por manos de artesanos ecuatorianos, desde las puertas y ventanas hasta el equipamiento. El ‘rooftop’ ofrece una vista de 360° de la capital ecuatoriana, desde lo más alto del domo. Allí, los huéspedes pueden degustar el menú del bar, cuyo nombre es El santo que da marido.
Con cielorraso de vigas y cabeceras grabadas, las habitaciones refinadas y cálidas con pisos de madera ofrecen ducha tipo lluvia, tetera y cafetera, caja fuerte, TV de pantalla plana y conector para iPod. También tienen bocadillos y Wi-Fi gratuitos. Las habitaciones mejoradas incluyen cama de diseño personalizado. Se ofrece servicio a la habitación.
Este hotel lujoso, que funciona en una casa restaurada de estilo colonial español del siglo XVIII, se encuentra a 5 minutos a pie de 2 paradas de autobuses. Además, está a 1 km del centro histórico de Quito.
